Soberanía digital: Colombia y Perú frente al dilema geopolítico de la nube"
- Alfredo Arn
- 18 sept
- 2 Min. de lectura

La pugna geopolítica entre Estados Unidos y China por la supremacía tecnológica ha encontrado un nuevo escenario en América Latina, donde países como Colombia y Perú enfrentan el crucial desafío de decidir quién almacenará sus datos gubernamentales más sensibles. Mientras Colombia avanza en una megalicitación de nube pública que ha desatado abiertamente esta competencia, Perú observa con atención un proceso que podría definir el futuro digital de la región.
Colombia ha optado por una estrategia centralizada y ambiciosa; una licitación de 334 millones de dólares para su Nube Pública de V Generación que manejará datos sensibles del Estado. Gigantes como Microsoft, Amazon y Google compiten directamente con empresas chinas como Alibaba Cloud y Huawei, en un proceso que trasciende lo comercial para convertirse en un escenario de tensiones geopolíticas explícitas.
En contraste, Perú mantiene un enfoque fragmentado y descentralizado, donde cada entidad estatal negocia por separado sus servicios de nube sin una estrategia nacional unificada. Esta aproximación ha evitado el debate público sobre los riesgos geopolíticos, pero también ha impedido que el país desarrolle estándares comunes de ciberseguridad y obtenga el poder de negociación que brinda la escala.
Ambos países comparten desafíos fundamentales: dependencia tecnológica de proveedores extranjeros, marcos regulatorios insuficientes para la era cloud y preocupaciones crecientes sobre qué ocurre con los datos ciudadanos almacenados en servidores fuera de sus fronteras. La ubicación física de los datos y la aplicabilidad de leyes extranjeras como la CLOUD Act estadounidense o la Ley de Inteligencia Nacional china representan retos comunes.
La experiencia colombiana destaca por haber hecho transparente un debate que usualmente ocurre entre bastidores técnicos. La advertencia pública de la Embajada de EE.UU. sobre los riesgos de los proveedores chinos y la insistencia del presidente Petro en una "nube soberana" han posicionado el tema en la agenda pública, algo que aún no ocurre en Perú.
Las diferencias en capacidad técnica local también son notorias. Colombia avanza hacia la definición de requisitos de soberanía digital mientras Perú carece de infraestructura nacional alternativa y talento especializado suficiente para gestionar nubes gubernamentales a escala. Esta brecha técnica limita las opciones de ambos países pero en distintos grados.
El resultado de la licitación colombiana, que se definirá en octubre de 2025, establecerá un precedente regional crucial. Si Colombia incluye proveedores chinos o se inclina exclusivamente hacia los estadounidenses, o si logra imponer condiciones estrictas de soberanía data, marcará el camino que otros países incluyendo Perú podrían seguir.
La soberanía digital se ha convertido en un nuevo frente de la autonomía nacional, y cómo Colombia y Perú manejen este desafío definirá no solo su seguridad nacional sino también su posición en el tablero tecnológico global. La región observa cómo se desarrolla esta batalla silenciosa pero crucial por el control de su futuro digital.







Comentarios